A partir del escándalo con el acopio de alimentos y del faltante de gas por frenar la obras públicas, la expresidenta liquidó al gobierno libertario en las redes sociales.
Cristina Kirchner.
La ex presidenta Cristina Kirchner volvió a volcarse a sus redes sociales para dejar al desnudo la impericia de la gestión de Javier Milei, esta vez a partir de los dos duros golpes que le asestó la realidad a los libertarios: el escándalo que significa acopiar mercadería que debería ser destinada a comedores mientras miles de personas enfrentan cada día dificultades para poner un plato de comida sobre sus mesas y la importación de gas por la falta de finalización de obras en los gasoductos.
«Comprobación empírica de ideas que no funcionan y funcionarios que tampoco funcionan. Sus consecuencias prácticas, económicas y humanas», tituló su publicación la expresidenta, quien entendió que en la Argentina se están expresando las «consecuencias económicas de ideas que no funcionan (superávit o muerte… aunque sea trucho)».
También se refirió a la importación de gas de la última semana: «Si este gobierno hubiese continuado con el ritmo y el calendario previsto para las obras de las plantas compresoras del gasoducto Néstor Kirchner en las localidades de Tratayen y Salliqueló, Argentina, entre los meses de mayo y agosto, hubiera importado casi 18 barcos menos de GNL y ahorrado la bonita suma de 450 millones de dólares. Además, ninguna fábrica hubiera parado su producción y ningún argentino suspendido su trabajo por falta de GNC para su auto».
Además, consideró que en la falta de entrega de alimentos se reflejan las «consecuencias humanas de funcionarios que no funcionan (porque no saben, no entienden, no firman por miedo, no les importa, o lo que es peor… todo junto)»: «Luego de mentiras y negativas públicas se descubre, en depósitos del Ministerio de Capital Humano, la existencia de casi 6 mil toneladas de alimentos sin repartir, en los que hay casi 1 millón de kg de leche en polvo (equivalentes a casi 10 millones de litros), de los cuales casi 400.000 kg vencen en el mes de julio».
«Comedores comunitarios que por no recibir asistencia del Ministerio de Capital Humano, tuvieron que dejar sin comida a las familias que asistían. Pibes y pibas que no tomaron un vaso de leche cuando correspondía. Mientras tanto la comida se pudre en los depósitos», dijo Cristina Kirchner y concluyó preguntando: «Y si nadie hubiera reclamado o denunciado nada… ¿Qué hubiera pasado con esa comida?».